Desde la autopista que nos lleva a los Pirineos, a la altura de Tarbes, el Midi de Bigorre y su observatorio se destacan claramente de la cadena al ser a su norte. Muy a menudo, en verano o en invierno, había cruzado el Col du Tourmalet. El Midi de Bigorre (2876 m) estaba allí... pero no fue nunca el objetivo de una salida. Ya era hora...
El miércoles 13 de julio, salimos de Donostia para Barèges, cerca del punto de partida de la mañana siguiente. El jueves, decidimos salir desde la última gran curva antes del Col, encima de Super-Barèges a 1944 m de altitud.
Carretera que sube al Col du Tourmalet y parking a 1944 m de altitud
Últimos rododendros en flor
Mirando por atrás se ve muy bien la subida.
Al fondo, el macizo de Néouvielle
Llegada al lago de Oncet (2378 m)
De repente, las nubes se abrieron y vimos la cima
Lac de Oncet y Néouvielle
El lago, cinco minutos más tarde de la foto anterior
Grandes neveros en el camino de subida
Sorpresa al levantar los ojos del suelo...
Llegando a la cima con unos minutos de cielo azul
Las nubes corrían muy rápido, el viento soplaba fuerte y hacía mucho frío.
Al llegar a la terraza cimera, se vive un momento
de frustración al encontrarse con un cartel grande avisando a los amigos
montañeros que si quieren tener acceso a la "parte turística", hay que
tocar un timbre y pagar 18 €!!! Como quería saber lo que había al otro lado de la verja, toqué el timbre y vino una simpática señora. Me explicó que había bar,
restaurante y museo, y que además dentro de este precio, estaba incluido el billete
de bajada en teleférico... me pareció original cuando se supone que a los
montañeros nos gusta subir pero también bajar lo que acabamos de subir. Una
cima está ganada cuando se llega abajo.
El teleférico que sube desde el collado
Bajando...
... de nuevo, hay que sortear los grandes neveros
No hay más fotos al bajar, al andar en una espesa niebla.
Tardamos en total unas 6 horas, con un desnivel positivo de 930 m.
De allí, fuimos a Cauterets donde ibamos a juntarnos con hij@s y niet@s para al día siguiente, subir al refugio des Oulhettes. En el camino de bajada después de Barèges, visitamos el pueblo de SERS y su iglesia del siglo XII, una verdadera joya...
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ResponderEliminarEstuve en el observatorio; pero llegando de Bilbao,pasando por el Aubisque y otros puertos, hasta arriba, en un scooter Vespa 200 cm^3, con mi novia de entonces, justo después de que aquel famoso asteroide (o cometa) se hubiera precipitado sobre Júpiter. Una chica vino a hablarme, en el bar; me dijo en francés que habían sido los primeros en el mundo en ver y fotografiar el asunto de cerca; qué bonito hubiera sido trabajar, reposar y descubrir; aunque soy sólo un autodidacta, casi un ignorante en materias celestes; allí.
ResponderEliminarLo siento pero he retirado el comentario "gramatical".
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